domingo, noviembre 28, 2004

Henri Cartier-Bresson


Por favor. Nadie. Absolutamente nadie, ni siquiera los muertos o los ciegos, pueden perderse la excelente exposión de fotografías del maestro Cartier-Bresson en el Bellas Artes. Posted by Hello

sábado, noviembre 27, 2004

Geometría de luz y sombra.


O tan sólo geometría que necesita un espejito para desdecirse de todo teorema que no le signifique placer y alagría a la hora de entregarse a las ventanas... Otra posibilidad es infinitamente más lúdica pero tiene que ver con la desmesura de no saberse del todo real y con un punto fijo de donde partan líneas y planos para un próximo sueño... Hagan sus apuestas. Posted by Hello

viernes, noviembre 26, 2004

Graffiti en calle de Santiago


graffiti Posted by Hello Todos somos niños... pintados... sobre una superficie de mármol...

(J.S.Bach. Suite Francesa Nº 1, BWV 812)




Un día después releyó el blog y decidió cambiarlo, porque todo está en constante mutación: ... Y dijo: “Bach, querido Bach”. También dijo: “piano y Glenn, querido Glenn Gould ”. “Bach está muerto y Glenn también está muerto pero los escucho a ambos”. La música fue el consuelo de la cola del banco, de los ruidos de la calle, de la incertidumbre, de los muertos de Irak y de los cisnes de cuello negro en el sur de Chile, y de tantas otras desdichas reales o imaginarias.
Cuando terminó de escuchar la suite francesa Nº 1, se conectó a internet y por obra del azar hizo un clic en un blog que nunca antes había visitado donde leyó lo siguiente: “Hermano, usted lo sabe, pero se hace el tonto: es todo la misma mierda, el mismo tedio insoportable, fíjese en ese boludo al que le suena una fuga de Bach en el celular, y se cree una especie de médium de todas las perfecciones de la música occidental o los hijos de puta de los nazis que despachaban a los judíos haciendo sonar a Wagner en los altoparlantes de los campos de concentración, o mire esa casa con rejas y perros en la puerta, puede que ahí viva una descendiente de alemanes que le pone a su telefonito la cabalgata de las walquirias y sonríe cuando alguien menciona el nombre de su general de mierda...”

Un amigo cambia cada dos días su fondo de escritorio. Hoy tiene a Venus en el día de su nacimiento. Mañana posiblemente sea el turno de van Gogh con sus girasoles y en pocos días más estará Berni con algo de la serie de Juanito Laguna. De vez en cuando también pone alguna fotos que él mismo toma como mero aficionado. Esos días suele encender poco el computador y dejar que el silencio sea la imagen más perfecta de sí mismo, aunque admite que suele fracasar en ese sentido... Posted by Hello

Mero saludo y noticia del náufrago...

Dicen que el broli fue bien recibido allá en la ínsula...
Dicen que el gato cumplió años y le regalaron el "Catálogo de pájaros" de Olivier Messiaen, una obra para piano de dimensiones gigantescas... y también seis conciertos para cello de Vivaldi, una novela de Auster y otra de Ampuero y un almuerzo en el Praga donde degustaron con su gata: pato y ciervo... Ella pato asado y él ciervo... Y sin ninguna culpa ecologista por la muerte del hermoso animal de gran cornamenta...
El cine chileno se puso a ojos vistas del gato que suscribe con "Promedio rojo", de buena factura estéticapor la feliz inclusión de formato "comic", y "Mujeres infieles"; ambas películas aprueban con buena nota, aunque nada para rasgarse las vestiduras...
Dicen también que el gato anda sonriente y que ojalá no le salga un laburo y se ponga de una vez y para siempre a escribir esa novelita que le anda rondando las almas de las musas que a veces son bastante hijas de puta y esquivas...
Se dice adiós pero desde un resignado agnosticismo...
Se dice que les vaya bien y que la dicha y el orgasmo no les sea esquivo...
Chau queridos pájaros, peces, gatos, gente...

La luz como juego del sí mismo... o variación en el laberinto... Posted by Hello

Una hojita para los buscadores de espejos... Posted by Hello

martes, noviembre 23, 2004

(3468)


...compartir la nada de las palabras
los mensajes equivocados
los silencios que abofetean el tedio

palabras que nos salvan
con manitos de barro
salpicadas de sangre
y restos de alas de mariposas negras
palabra que ocultamos
en la nada de otras palabras...

viernes, noviembre 19, 2004

Muñeca rusa

Abro el blog como quien abre muñecas rusas y después las coloca una al ladito de otra, en hilera sobre una repisa y toma un coquito de eucalitus que trajo de una lejana isla y procede a arrojar el coquito de eucaliptus que todavía tiene olor a eucaliptus y derriba la tercera de las muñecas rusas que cae al piso y hace clac clac... rueda un par de metros... Y hasta ahí llega el experimento...
Pero no. Hay algo de curiosidad, irrefrenable curiosidad, porque si cayó la tercera de las muñecas rusas, por algo debe ser. Entonces se la lavanta del suelo, se la abre y curiosamente se encuentra en el interior de esa muñeca caída por efecto de un proyectil de coquito de eucaliptus traído de una Isla del Pacífico Sur, un pequeño papelito doblado cuidadosamente en cuatro y donde se lee lo siguiente: "Si hubieras derribado la cuarta muñeca rusa, no habrías encotrado nada en su interior; si hubiese sido la segunda, habrías sonreído y esa sonrisa se habría perdido en la nada de tantos otros gestos inútiles; pero debido a que fue la tercera muñeca rusa que eligió el azar, entonces... querido amigo: puedes cerrar el blog en paz contigo mismo y con todas las muñecas rusas que habitan este conmevedor e inextricable universo... Por lo tanto puedes irte tranquilo a escuchar ese hermoso concierto de Bohuslav Martinu para oboe y orquesta... Y a otra cosa querido gato...

jueves, noviembre 18, 2004

Objetos de la memoria de un viaje.

Nuestro gato tiene un collar verde botella con un cascabel que le compramos en Salzburgo, por eso quizás le guste la música de Mozart. En este instante el gato del cascabel está en la ventana cerca de dos pisapapeles venecianos que también nos trajimos de ese viaje.
En Roma, en una tienda del Coliseo le tomé una foto a un gato de pelaje romano, que dormía su siesta sobre una pila de libros que en el lomo decían: Roma.
En los trenes de Italia y Austria leímos a Tabucchi, Saramago y Andahazi.
En la cúpula del Duomo de Florencia escuchamos por primera vez en la vida el Souvenir de Florencia de Tchaikovsky.
En Venecia tomamos muchos helados, y en el hotel donde nos alojamos había un gato que se llamaba Skiper.
En Praga volvimos a encontrarnos con Mozart y Don Giovanni en marionetas.
En Budapest recordamos un sueño de muchos años atrás.
Viena fue el Beso de Klimt. (Es increíble cómo el paso por una ciudad puede concentrar su memoria en una sola tela).
En Praga compramos un reloj de arena para la madre de mi mujer. Y ella me regaló una esfera de cristal de bohemia que está en la biblioteca justo delante de los Diálogos de Platón y junto a un puma de cerámica del Cusco.
En todos los Museos donde estuvimos compramos postales de las pinturas que nos gustaban y ahora con esas postales marcamos los libros que vamos leyendo.
Cuando regresamos de Europa nos fuimos al Caribe y en Isla Margarita, al niño, lo que más le gustó fue una rana con la que se encontró un par de noches de esa última semana de vacaciones.

miércoles, noviembre 17, 2004

Juegos del gato.

No era un día para la cabalgata de las Walquirias. Mejor un quinteto de Elgar. Querida chamber music. No podía faltar el granito de arena al libro de arena que es esta interminable orilla de la humanidad virtual.
¿Con cada palabra nos hacemos más o menos reales? ¿Alguien responderá?
Los perros ladraron y el gato se asustó. Después el gato escapó por esas callecitas del laberinto. Nadie lo vio llegar. Nadie le preguntó cómo había sido aquél sueño. Cuando despertó frente a la pantalla tenía un par de mensajes fresquitos, recién bajados de las nieves eternas del supramundo virtual. Uno de esos mensajes abundaba en signos de interrogación que eran como gritos desesperados. Otro de los mensajes rayaba el pavimento con tiza blanca (una lástima que no fuera roja o amarilla o violeta), pero no para una rayuela... Naturalmente, la piedrita cayó lejos del cielo, pero también lejos de la tierra...
Y bue... paciencia minino...

domingo, noviembre 14, 2004

Oscuridad 3445

Tal vez ayudó el Cuarteto op. 1 Nº 4 de Haydn. Queda sólo la oscuridad con sus numerito correspondiente y el fantasma que había habitado el supuesto poema. El resto se aniquila, se devuelve a la tibia n@d@... Pero queda algo en un cuaderno de papel con tapas de Modigliani, pero no cuenta en este mundito virtual...

Lluvia de Noviembre.

Tanta lluvia... como si no fuésemos tan sedientos... como si no necesitáramos esa sola gotita donde se refleje el rostro del fantasma, que nos obliga a escribir cada vez con más alegría en las uñas... en las uñas donde esa palabrita también podría ser escrita en Braille... Ahora que todo es caída horizontal y nos bastan unas pocas palabras para seguir siendo reales...

viernes, noviembre 12, 2004

Libro de arena

Internet es un libro de arena. Un libro infinito y mutante que se está haciendo constantemente. Un libro sin principio ni fin.
Es asombroso cómo los hombres sueñan dioses y a vaces logran hacerlos realidad.
Siguiendo con Borges, internet es el jardín de senderos que se bifurcan y también la Biblioteca de Babel, ese universo de hexágonos y pasillos que dan al abismo y donde están todos los libros posibles.
Internet también es el laberinto y el arcidriche donde sucede este maravill0so juego del conocmiento humano.
Le doy las gracias a quien me sugirió esta misteriosa palabrita: n@d@ dirección imposible, @ duplicada por el desvarío y la ilusoria tentación de abarcarlo todo.

jueves, noviembre 11, 2004

De virtuales a reales...

No tanto. Apenas algo más reales. Siempre virtuales en la incertidumbre. Por la noche, el hombre virtual le dedica a sus fantasmas las hermosas Bagatelles op. 126 de Beethoven y nada menos que por Glenn Gould (querido Glenn que tocaba su piano en la cima de los cerros de Juan Fernández). Ahora el hombre virtual espera algún mensaje, porque hay sonrisas que traspasan la pantalla y se confabulan con lo real, como la fruta que pide una lengua y el agua que regresa a la sed para que los desiertos de la palabra sigan con sus pantallitas encendidas.
Los mensajes continúan pero no pueden ser leídos en una sola noche...
Este mensaje será eliminado en poquísimos días. Y no será un pena para nadie...
El Tiempo Buenos Aires Aerod.