(Sufridero 5134)
En el sufridero cloacal contemplativo de los propios deshechos emocionales. Como decir: bajate de esa gaviota entristada que caga todo el mar. Y uno es el mar y la pluma de la gaviota con que nadie escribe la carta salvadora. Ya no se imploran salvaciones a la arena ni al viento. Un grito sin violín de fondo marino. Una caracola donde se escucha sólo el regurgitar de la propia frustración. No es la especie más cercana a esas pocas palabras que pueden ser dichas sin suficiente aire. Aire mínimo, que repite aire. Así la respiración asmática de un mundo desfalleciente. Y la alegría furibunda en una cópula que hace noche en dos cuerpos que se fotografían frente a un espejo de placer invulnerable. El sufridero mengua con una sola flor blanca que aún no termina de despuntar su voracidad.
Foto unsologato.
2 Comments:
el infierno también:
puede estar aquí
ser azul
ser acuoso
tener ventanilla de escape
un abrazo, poeta!
Todo tiene su aire, incluso el espejo lo contiene... tus palabras son aire. Beso ahogado.
Publicar un comentario
<< Home